Cómo recargar el aire acondicionado de tu coche, cómo evitar fugas y el mal olor
La carga del aire acondicionado del coche tiene que hacerse en un taller, porque es una operación complicada para un usuario, aunque existan kits de recarga. ¿Cada cuánto tiempo hay que recargar el aire acondicionado de un coche? No hay un tiempo de mantenimiento establecido. El aire acondicionado de un coche funciona con un gas refrigerante dentro de un circuito cerrado. Este gas se deteriora y en el sistema suelen aparecer fugas con el paso de los años, bien en sus componentes principales, como el compresor; o bien en las juntas y manguitos del circuito, que sufren con el tiempo por la elevada presión a la que funciona el sistema. Lo normal es que, a partir del cuarto año de vida de un coche, el sistema comience a perder entre un 15 y 20% de la carga de gas cada dos años.
Entonces, ¿cómo sabemos cuándo hay que hacer una recarga del aire acondicionado? Básicamente, cuando el aire del sistema de climatización de coche ya no salga frío aunque lo regulemos a temperaturas bajas. Es importante no dejar que pase demasiado tiempo antes de recargarlo, porque el compresor sufre mucho cuando el sistema tiene poca carga.
Eso sí, un buen mantenimiento del sistema puede alargar su vida útil y el tiempo entre recargas del aire acondicionado. Por ejemplo, es bueno hacer funcionar el aire acondicionado del coche una vez al mes, para que en todo el sistema y sus conductos no se acumule demasiada humedad. En el lado opuesto, no es recomendable forzar demasiado el sistema, por ejemplo, regulándolo a temperaturas por debajo de 20 grados con una temperatura exterior elevada.
Cómo evitar el mal olor del aire acondicionado del coche
El mal olor del aire acondicionado de un coche está causado por dos factores: humedad y bacterias. Para evitar la primera, y como hemos comentado antes, hay que usar el aire acondicionado una vez al mes, por lo menos, aunque sea invierno. Una forma muy práctica de usarlo es para desempañar el parabrisas, pues el aire que sale del sistema de climatización es más seco que el del ambiente. Otra buena costumbre es, de vez en cuando, apagar el aire acondicionado y dejar el ventilador en funcionamiento durante unos minutos, antes de apagar el motor, para que el sistema se seque.
Para evitar la formación de bacterias en los conductos y canalizaciones del sistema es recomendable cambiar los filtros cuando recomiende el fabricante y revisar todo el sistema cada dos o tres años, a partir del cuarto año de vida del vehículo. Un estudio de la Universidad Metropolitana de Londres detectó microorganismos en todos los filtros de aire acondicionado de coche analizados. Estas bacterias, hongos y microorganismos se generan en el evaporador del sistema y el filtro es la única barrera para que no ingresen al interior del vehículo.