Coches familiares de renting y consejos de seguridad
Ahora que el renting de vehículos se ha consolidado como una de las opciones de movilidad más rentables, la demanda de esta opción de alquiler se ha extendido a otros ámbitos. Los coches familiares de renting también son una solución ventajosa para los usuarios particulares que se mueven en compañía.
¿Cómo elegir un coche familiar de renting?
Las necesidades de una familia no son las mismas que las de un trabajador autónomo o las de una gran empresa. Sin embargo, también este perfil de usuario puede encontrar una solución de movilidad hecha a medida con los vehículos familiares de renting.
Por lo general, las necesidades más habituales de este segmento de usuarios son:
- Amplitud: estos conductores no solo viajan con la familia sino con todo lo que ello conlleva (juguetes, ropa, accesorios…), por lo que necesitan un vehículo espacioso.
- Maniobrabilidad: aparte de la comodidad al volante, un coche familiar de renting debe garantizar un buen nivel de adaptabilidad en el interior para ajustarse a las necesidades de cada desplazamiento (p. ej., colocar una sillita de bebé o llevar un carro).
- Seguridad: los desplazamientos con niños exigen un extra de seguridad, desde elementos como cinturones, puntos de anclaje o bloqueo de ventanas y puertas, hasta otros dispositivos como airbags, frenado de emergencia o detectores de fatiga.
- Entretenimiento: los avances en tecnología, como las pantallas y las conexiones inalámbricas, permiten que los viajes en coche sean mucho más entretenidos para los niños.
Viajes en familia más seguros
Ponerse al volante de un coche familiar de renting implica una gran responsabilidad. Aunque la oferta de vehículos de renting orientados a este sector ya contempla las necesidades más comunes de los usuarios, no está de más repasar algunos consejos útiles para la conducción de un coche de renting familiar.
- Planificar la ruta: es importante salir de casa con las ideas claras, sobre todo en desplazamientos de media y corta distancia. Conviene evitar períodos de conducción muy largos, establecer de antemano los puntos de parada (p. ej., para comer o repostar) y elegir las rutas más cómodas.
- Revisar el coche: el mantenimiento preventivo del vehículo es una de las mejores maneras de evitar contratiempos. Aunque los servicios de renting incluyen las revisiones rutinarias del vehículo, antes de ponerse en ruta es importante comprobar el estado de aspectos básicos como líquidos, ruedas y luces.
- Seguro: los desplazamientos en familia exigen un extra de seguridad, por lo que se contrata el renting de vehículo familiar con seguro de responsabilidad civil y daños propios. Es una garantía de seguridad para toda la familia durante los desplazamientos, en cualquier lugar y a cualquier hora del día.
