Cómo ahorrar en tu empresa gracias al renting de coches
Si la adquisición de un vehículo nuevo tiene un coste significativo, su mantenimiento o su cambio incrementan la inversión. ¿Y si fuera posible cambiar de vehículo cada cierto tiempo y además olvidarse de los gastos derivados de su mantenimiento? Existe una solución: se llama renting de coches y permite a las empresas un importante ahorro en la gestión de sus necesidades de movilidad.
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Renting de vehículos: ni compra ni alquiler
De forma independiente, el alquiler y la compra de vehículos presentan sus ventajas y sus desventajas. La fórmula del renting de coches es una solución intermedia con la que aprovechar al máximo los beneficios que ofrecen las dos.
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¿Por qué elegir la opción de renting en lugar de la compra?
Adquirir un vehículo en propiedad sería una opción atractiva si no estuviera asociada a una serie de gastos que implican tiempo y dinero y que no siempre son fáciles de predecir. Aparte del pago de impuestos, seguros e ITV, hay otros desembolsos asociados al uso del vehículo que no tienen un coste fijo, como averías, reparaciones y mantenimiento.
Con el renting existe la posibilidad de suscribir un contrato de “todo incluido” que evita a empresas y autónomos tener que estar pendientes de estas gestiones y centrarse en otros aspectos más importantes de su actividad.
Escoger la modalidad de renting en lugar de la de compra es invertir en tranquilidad y en estabilidad. Es posible hacer una previsión de todos los costes y tenerlos bajo control en una cuota mensual fija que libera al empresario de otras responsabilidades.
4 ventajas del renting de coches para empresas
Ahorro fiscal con deducciones en el IVA soportado, en la liquidación del Impuesto de Sociedades y en el IRPF.
Gastos fijos y sin sorpresas. No hay que hacerse cargo de los desembolsos asociados a un vehículo en propiedad y es más sencillo diseñar el plan de viabilidad de la empresa.
Liquidez de la empresa. No existe un desembolso inicial difícil de asumir, no es necesaria la financiación y se reduce el riesgo de endeudamiento.
Las modalidades de renting flexible permiten hacer cambio en las altas y bajas de la flota sin penalización, por lo que se adaptan a las necesidades de cada momento.
